Los medios de
comunicación nos dan la noticia de que se esta negociando entre DGA y
Ayuntamiento de Zaragoza la apertura de dos edificios de la pasada Expo de
Zaragoza. Son la Torre del Agua y el Pabellón
Puente. La noticia sorprende porque parece ser que no esta tan claro que
estos edificios estén abiertos a pesar del posible uso para los eventos que se
dan en nuestra ciudad. El gobierno de la Sra. Rudi hizo caso omiso de estas
cuestiones y los edificios que están declarados BIC no se han podido visitar a
pesar de que por Ley es obligatorio poderlos ver cuatro veces al mes. En estos
momentos la dinámica sigue igual esperando que en estas reuniones nos den la
grata noticia de que definitivamente la Torre del Agua y el Pabellón Puente se podrán
visitar todos los días, como cualquier monumento, quedando en exclusiva para
congresistas aquellos días en que se celebren esos eventos. Casos como este nos
hace pensar que la falta de
responsabilidad o falta de imaginación o simplemente de conocimiento de muchos
de nuestros políticos impiden el crecimiento cultural de sus ciudadanos e
impeden la creación de empleo. Dejar sin uso estos monumentos es parar unos
motores turísticos-económicos de primer orden.
Una forma de conservar nuestro patrimonio cultural es conocerlo. A continuacion os pongo una reseña de un edificio que forma parte del Mudejar de Aragón, declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. Iglesia de San Gil de Zaragoza Los materiales de los que esta constituido el templo son los tradicionales en la arquitectura mudéjar de Aragón: ladrillo, yeso y cerámica vidriada para el exterior. La disposición de los ladrillos es a soga asentados sobre yeso. Es de nave única con testero recto y capillas laterales entre torres contrafuerte, que son como pilares estructurales, y esta dotada con tribuna o paseador por encima de las naves laterales abierta al exterior, los pilares contrafuerte se abren paso para poder circular. Esta estructura arquitectónica queda oculta, y es propia del mudéjar., todas las cargas se distribuyen entre los diferentes torres contrafuerte. En la trasformación del XVIII se invirtió la orientación general del templo dando como resultado dos ábsides poligo
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