Otra desidia municipal
De nuevo debo decir que mi querida
Zaragoza sigue siendo poco sensible ante nuestro patrimonio cultural. En este
caso me fijo en dos situaciones que se están dando en el Casco Histórico y en
el Cementerio de Torrero.
En el cementerio en la zona
histórica justo a la entrada tradicional existe una tumba de finales del S. XIX que sirve en la actualidad, además de
su función funeraria, como comedero de felinos. Entre la valla metálica y el panteón
se ha dispuesto de un artilugio de color verde en el que se depositan los recipientes
de comida. En su parte exterior un cartel indica la existencia de esta colonia
felina. El responsable municipal de esta actuación debería reflexionar sobre
esto y darse cuenta que no es el lugar más
indicado para cuidar a estos animales, en los alrededores del cementerio hay
cantidad de espacios libres donde ubicarlos. Este responsable con su actuación
indica poco respeto hacia el patrimonio cultural tanto en su vertiente artística
como humana. A esto hay que añadir que también hay excesivo abandono en conservación
del patrimonio. El vandalismo de algunas personas ha hecho que muchas cruces de
tumbar estén rotas, otras abandonadas a su suerte. La impresión que da este
espacio es desoladora.
Unido a lo anterior en el centro
del Casco Histórico en la confluencia de la calle Carrica con Contamina se están
haciendo unos derribos de pequeños edificios del S.XVIII para poder ensanchar parte de la
calle y de este modo poder acceder con facilidad con automóvil. Esta actuación se
debe a un cambio en PGOU que se hizo en la corporación anterior. Hay que
advertir que Patrimonio Cultural del Ayuntamiento hizo un informe desfavorable a
pesar de lo cual se aprobó. De nuevo el espíritu de la Ley de Patrimonio se lo
han saltado a la torera y la consecuencia es clara y es que cada vez estamos
desfigurando y perdiendo nuestro rico patrimonio urbano.
Comentarios