Museo Pablo Serrano Zaragoza cuenta desde la semana pasada de dos nuevos centros culturales de primer orden. Se trata del IACC, Instituto Aragonés de Arte y Cultura Contemporáneos Pablo Serrano que viene a sustituir al antiguo Museo del mismo nombre y el Museo Diocesano de Zaragoza. El edificio del Pablo Serrano resulta espectacular por sus formas y es del arquitecto José Manuel Pérez Latorre. Su interior destaca por sus amplias salas y la escalera mecánica situada en un lateral del mismo. A su vez este edificio se asienta sobre unas primitivas naves industriales del principios del S.XX que han quedado casi ocultas por la nueva construcción. La apertura de este museo es una buena noticia para la ciudad a pesar de que se ha inaugurado “en precario” ya que solamente hay expuestas una mínima parte de las obras de nuestro escultor aragonés. Parece ser que las prisas vienen dadas por las próximas elecciones autonómicas. Puedo entender la situación pero es una mala práctica dado que la primera impresión que tienes no es tan positiva como era de esperar. Creo que se podían haber expuesto mas obras aunque se tuvieran que remodelar mas tarde. Espero que pronto se pueda ver en su totalidad a la vez que espero que se pongan guías para explicar la obra de Serrano y así poderlo entender en todas sus dimensiones. No es posible visitar, hoy día, un museo sin que te expliquen los contenidos del mismo. Tampoco estaría mal cobrar una pequeña cantidad para valorar mejor la visita y responsabilizarnos de nuestro patrimonio cultural.
Una forma de conservar nuestro patrimonio cultural es conocerlo. A continuacion os pongo una reseña de un edificio que forma parte del Mudejar de Aragón, declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. Iglesia de San Gil de Zaragoza Los materiales de los que esta constituido el templo son los tradicionales en la arquitectura mudéjar de Aragón: ladrillo, yeso y cerámica vidriada para el exterior. La disposición de los ladrillos es a soga asentados sobre yeso. Es de nave única con testero recto y capillas laterales entre torres contrafuerte, que son como pilares estructurales, y esta dotada con tribuna o paseador por encima de las naves laterales abierta al exterior, los pilares contrafuerte se abren paso para poder circular. Esta estructura arquitectónica queda oculta, y es propia del mudéjar., todas las cargas se distribuyen entre los diferentes torres contrafuerte. En la trasformación del XVIII se invirtió la orientación general del templo dando como resultado dos ábsides poligo
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